Encontré algo en el parabrisas de mi coche que te ayudará más que hacer deporte

Esta mañana fui a mi coche a recoger el correo.

Sí, lo sé. No estoy loco.

¿A ti no te ha pasado que el parabrisas de tu coche se ha convertido en un buzón improvisado?

Hoy me encontré con uno de esos anuncios que lo hacen todo:

Pasear perros.
Hacer la compra.
Lavar la ropa.

Por poco te acuestan a los hijos.

Me alucina la eficacia de la gente.

Y entonces pensé, ¿sabes qué otro buzón está igual de saturado?

Tu correo electrónico.

Tan pronto te llega una factura importante como un vendehumos intentando desvalijarte la cuenta del banco.

Y mientras tanto, ahí estás tú, en un juego de supervivencia, intentando distinguir los correos que te salvarán de pagar una multa a Hacienda… de los que pueden generarte una deuda impagable.

Y aquí está el problema:

Los servicios de correo han mejorado.

Pero los timadores también.

Antes era fácil detectarlos:

Errores ortográficos.
Logos mal hechos.
Un príncipe nigeriano prometiéndote dinero.

Ahora, con las IA más inteligentes que el 90% de los humanos… estamos jodidos.

Se llama phishing, y está por todas partes.

Y no, abrir un correo no te va a arruinar la vida.

(Casi nunca.)

Pero clicar en el enlace equivocado, sí.

REGLA BÁSICA:

Solo fíate de correos de remitentes que conoces MUY bien.

Antes de hacer clic:

✔ Revisa la dirección de correo.
✔ Contrasta cualquier enlace antes de meter tu número de cuenta.

Para eso, te dejo una herramienta gratuita que te puede ayudar a comprobar enlaces sospechosos:

➡ VirusTotal

Por cierto…

Te tengo una noticia.

Empiezo en YouTube.

Así que, si esta tarde a partir de las 18:30 quieres echarle un vistazo, aquí tienes el enlace:

➡ Ver mi nuevo vídeo

Te espero por allí.